Desde peques nos han chiflado los
platos de pasta, una temporada nos dio por pedirle a nuestra madre espirales,
que nosotras llamábamos “rulitos”, los comíamos de diferentes formas, pero
sobretodo nos gustaba lo más sencillo, con tomate y atún , que tiempos
aquellos…
Hoy nos hemos decidido por una
receta de pasta con tomate, pero con un toque diferente, y sobretodo de fácil
preparación. Lo más interesante es que los ingredientes que se necesitan para
elaborar esta receta los solemos tener por casa.
A ver que os parece!
Ingredientes (para 2 personas):
-Salsa barbacoa.
-1 vaso de tomate frito.
-1 cebolla.
-pasta.
-1 pechuga de pollo.
-ajo en polvo.
-sal y aceite.
-pimienta molida.
-una pastilla de caldo de
verduras o de pollo.
-orégano
Preparación:
Primero ponemos la pasta a cocer
con una pastillita de caldo en el agua y un poco de aceite.
Por otro lado en una sartén
freímos la cebolla con un poco de aceite, cuando esté medio hecha le añadimos
la pechuga cortada a dados, lo salpimentamos y le ponemos una pizca de ajo en
polvo. Para que quede mas tierna la pechuga y le de más sabor le ponemos unas 3-4
cucharadas del agua donde hemos hervido la pasta.
Cuando esté hecho y se haya
absorbido el agua añadimos la salsa barbacoa, lo hacemos a ojo, pero sería como
medio brick. Después añadimos el tomate frito.
Cuando la pasta este lista la
enjuagamos con agua y la escurrimos.
Vertemos la pasta en la sartén
donde tenemos la salsa y mezclamos bien. Le damos un toque de orégano antes de
servir!
Podéis poner encima de la pasta
queso rallado y gratinarlo.